En el mundo hiperconectado actual, es difícil distinguir entre las infraestructuras digitales y las físicas. Especialmente en el sector inmobiliario, la cantidad de datos que producen los edificios y lugares de trabajo es crítica. Para beneficiarse de la interpretación y el uso de estos datos, se necesitan soluciones tecnológicas que mejoren el rendimiento empresarial, lo que incluye la gestión de los bienes inmuebles, los espacios utilizados, los recursos, las operaciones y el mantenimiento, y la experiencia de los usuarios.

El facility management es fundamental en el proceso de innovación digital de las empresas y organizaciones.

¿Qué se entiende por facility property management?

El facility management se refiere al proceso de diseño, implementación y control mediante el cual se gestionan las instalaciones (por ejemplo, los edificios y los servicios necesarios para apoyar la actividad de la empresa) con el fin de garantizar unos servicios adecuados que satisfagan las expectativas de la empresa, creando al mismo tiempo un entorno de trabajo de calidad en las mejores condiciones económicas posibles. Por lo tanto, el facility management representa una serie de disciplinas y servicios necesarios para garantizar la funcionalidad, la seguridad, la eficiencia y la comodidad de todo el entorno de la empresa. 

El impacto de la tecnología en el facility management

La llegada de las tecnologías modernas, como la computación en la nube, ha cambiado todo el enfoque hacia el facility management. Los sistemas y software son esenciales para generar una cantidad importante de datos, que se combinan e interpretan para generar gráficos que sirven para comprender el rendimiento de los distintos recursos.

Las soluciones totalmente funcionales simplifican considerablemente las operaciones; de hecho, permiten:

  • optimizar el control centralizado;
  • mejorar el control de los sistemas y las tecnologías que se utilizan;
  • controlar a distancia las instalaciones y las actividades;
  • unificar la gestión de edificios situados en diferentes zonas geográficas;
  • centralizar las intervenciones del sistema cuando sea necesario;
  • obtener información sobre las acciones realizadas por personas y grupos de personas;
  • comprender el grado de utilización de los recursos;
  • reducir considerablemente los costes.

Cuando se trata de facility management, siempre debe utilizarse un enfoque data-driven; los datos permiten a los gestores mantenerse siempre al día sobre el estado y las actividades de las unidades inmobiliarias, predecir los riesgos y aprovechar las oportunidades, y diseñar de forma anecdótica la futura estrategia de negocio.